Serie: Tango

Cierro los ojos para no soltar

A veces, el tango no se escucha: se siente golpeteando en el pecho.
Abrazados en pleno tango, él cierra los ojos no por temor, sino por entrega. Ella lo sigue sostenida en su abrazo, y parece flotar entre los pliegues de un sueño compartido. No bailan: se sostienen.

El tango les sirve de refugio, y en el silencio que los envuelve, se prometen no soltarse, aunque todo alrededor se desvanezca.

Una fuerza invisible los mantiene unidos, como si el tiempo se hubiera detenido para cuidar justo ese momento.


Serie: Memorias olvidadas del Tango
Título: Cierro los ojos para no soltar
Tamaño: 90 x 60
Técnica: Mixtas digitales

Impresión única en Canvas Giclee
Año: 2024